La climatología jugó un papel fundamental en el desarrollo de las dos carreras del Campeonato del Mundo eni FIM Superbike 2014 disputadas el pasado fin de semana en Assen. La primera salida del día se dio con el cielo encapotado y algunos restos de humedad en la pista por la lluvia caída esa mañana temprano. Más tarde, se habían disputado 17 de las 21 vueltas cuando apareció la bandera roja por la presencia de aceite en pista, dejado por la montura con problemas de uno de los participantes.

Los pilotos del equipo Bimota Alstare, Ayrton Badovini y Christian Iddon, se habían clasificado en parrilla en las posiciones 14 y 16, respectivamente, pero ambos estuvieron luchando entre los diez primeros cuando sólo se habían disputado ocho vueltas. Así las cosas, todavía quedaban algunos charcos a lo largo del trazado de 4.542 metros y Christian se encontró de lleno con uno en la novena vuelta. El resultado fue una espectacular caída de la que afortunadamente escapó ileso. Ayrton continuó entonces su lucha con varios pilotos por la décima plaza y estaba alcanzando al líder de la categoría EVO, Nicolo Canepa, cuando la carrera fue detenida.

Justo cuando comenzaba la segunda carrera aparecía una lluvia torrencial a la que siguió un largo paréntesis hasta que se dio la salida definitiva, en esta ocasión con la distancia de carrera reducida a diez vueltas. La larga espera significó que Iddon tuviera tiempo para volver a tomar la salida, con los dos pilotos de Bimota Alstare finalmente en parrilla. Las condiciones resultaban bastante desfavorables y durante la primera vuelta Ayrton era víctima de una caída. Por su parte, aunque la BB3 de Christian había sido reparada, el equipo no había tenido tiempo suficiente para volver a poner todo en su sitio y tuvo que salir en carrera sin el cambio de marchas rápido ni el control de tracción. Era su primera carrera bajo la lluvia en Superbike y el piloto puso todo de su parte para finalizar después de cubrir diez vueltas bien pasadas por agua.

Ayrton Badovini: “Estoy bastante satisfecho con lo que hice en la primera carrera. Al comienzo decidí conservar los neumáticos y comenzar a tirar pasado el ecuador. A medida que pasaban las vueltas comencé a aproximarme a Niccolò (Canepa), el primero de los pilotos EVO. Mi BB3 estaba funcionado mejor que el día anterior y mi estrategia estaba funcionando, pero entonces apareció la bandera roja cuando quedaban todavía cinco vueltas. Honestamente, no tengo ni idea de lo que pasó en la segunda carrera. La pista estaba empapada, pero normalmente suelo rodar bien en esas condiciones. Sin embargo, hubo un momento en que estaba sobre la moto y al siguiente me encontré rodando por el suelo. Afortunadamente, la moto no estaba demasiado dañada y yo salí ileso”.

Christian Iddon: “La primera carrera estaba yendo bien y yo estaba contento con la situación. Estaba en el grupo que perseguía a Canepa y pensé en esperar al final de carrera para ver si podía rebasarle o no. Pero todos mis planes se fueron por el desagüe cuando pisé un pequeño charco y me fui al suelo. Es curioso porque el sitio no estaba en la parte donde más riesgos tomaba, así que es fácil imaginar que se trató más bien de un pequeño error por mi parte. El equipo hizo un trabajo increíble reparando la moto en muy poco tiempo. Después la nueva bandera roja y el retraso que provocó, permitieron que volviéramos a estar en parrilla, aunque a mi moto le faltaban un par de detalles. Al menos, si me concentraba en no cometer errores podría ganar algo de experiencia con la Superbike sobre mojado y acabar la carrera. Ahora ya sólo pienso en la próxima para seguir aprendiendo y estar cada vez más cerca de los mejores pilotos EVO”.