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En esta nueva entrega de la serie sobre los mejores y peores días que recuerdan las figuras actuales y del pasado, los protagonistas son el Campeón de 2003 Neil Hodgson y el Campeón de 2014 Sylvain Guintoli. ¡Estas son sus historias!

Hodgson señala su aparición como wild card en Donington Park en la temporada 2000 como su mejor fin de semana en WorldSBK. Él inglés, que alcanzó el título mundial en 2003, recuerda: "La mejor carrera es fácil para mí, tengo una muy destacada y fue en la temporada 2000. Estaba compitiendo en British Superbike y tuve la oportunidad de correr como wild card en Donington Park. Había corrido tres años anteriores en WorldSBK, de 1996 a 1998, y aunque tuve podios, nunca logré ganar. Me presenté como wild card, con cierta rabia, con algo por demostrar, realmente quería mostrar a todos que era un hombre diferente, ahora que corría con un equipo inglés y que tenía mucha más confianza”.

“Terminé tercero en la primera carrera, lo cual es bueno y refuerza un poco la confianza. Y luego, en la segunda carrera, tuve una muy buena batalla con otro wild card, Chris Walker, y con Nori Haga. Parecía que estábamos luchando por el segundo puesto, porque Pierfrancesco Chili lideraba la carrera, pero afortunadamente Frankie había elegido un neumático trasero más blando y empezó a decaer a medida que avanzaba la carrera. Justo al final, creo que su neumático estaba destruido, y cuando comencé la última vuelta, sabía que había una posibilidad de atraparlo. Afortunadamente para mí, tuvo una gran patinada a la mitad de la vuelta y pude aprovechar eso para superarlo y mantenerme en cabeza para ganar la carrera”.

El peor fin de semana de Hodgson llegó en Hockenheim en 1997, en una carrera que lideraba, pero en la que acabó retrocediendo a la quinta posición. El piloto británico explica: “Lideré la mayor parte de la carrera en Hockenheim y estuve en una batalla con Akira Yanagawa, Carl Fogarty y James Whitham. Cerca del final de la carrera, comenzó a lloviznar, tenía un poco de lluvia en la visera y Hockenheim es muy rápido, así que empecé a entrar en pánico. En la última vuelta estaba liderando y, en la última sección, Fogarty llegó a mi lado y cometí un error al soltar los frenos para tratar de ganar la posición por fuera; fue una equivocación. De hecho, me encontré con un poco de aceite que había dejado la moto de James Haydon en el warm up matinal cuando su moto explotó. Pisé un poco de aceite y la moto se fue de lado y eso supuso que pasara a la segunda posición. Seguidamente entré en la siguiente curva demasiado rápido. Entré en pánico y me salí de la pista. Pasé de estar en posición de ganar mi primera carrera en WorldSBK y terminé en el quinto puesto”.

 Para el campeón del mundo de 2014 Sylvain Guintoli, su mejor fin de semana fue el de Losail 2014, una elección lógica teniendo en cuenta que allí se aseguró el título al ganar tanto la Carrera 1 como la Carrera 2. El francés explica: “Era el último Round, con el título en juego y mucha tensión. Ese fin de semana fue extraordinario porque hubo todo eso, esa gran tensión, el hecho de que te jugabas todo el campeonato en esas dos carreras, y yo tenía 12 puntos menos que Tom Sykes. Ahí estaban todos los ingredientes para que fuera un fin de semana fantástico”.

“Todo salió bastante bien. Logré ganar las dos carreras, y era mi primer doblete en WorldSBK. En ese momento, terminar con estilo, con un apoteósico final para ganar el título y conseguir hacerlo en la línea y en la última carrera... Debido a esa tensión, cuando disputé esas carreras y gané, con el equipo, con mi familia también allí, mi esposa y los niños, todo hizo que fuera un momento maravilloso”.

El peor fin de semana de Guintoli fue Imola 2016, y realmente tiene motivos para no olvidarlo, ya que sufrió una escalofriante caída con serias consecuencias. El campeón galo recuerda: “La peor carrera es, con mucho, Imola 2016. Me caí durante la Superpole y fue una caída realmente fuerte. Físicamente, me encontraba bastante mal. Estuve un tiempo inconsciente. Recuerdo que cuando me caí, podía escuchar a las personas que me cuidaban, pero no podía sentir nada; Solo podía escuchar las voces, pero no podía moverme. Duró un rato, porque comencé a ver de nuevo en el centro médico, así que fue casi media hora”.

“Pensé que me estaba muriendo, y fue una sensación realmente horrible. Y como no podía moverme en absoluto, no sabía si estaba paralizado o no porque nunca me había pasado antes. Luego me desperté y mejoré, pero había sufrido lesiones serias que y me mantuvieron fuera del circuito por más de dos meses. Tuve fracturas, vértebras, sacro, y me rompí un tobillo. Es cierto que tienes fines de semana malos cuando el rendimiento es bajo, pero cuando se produce un accidente en el que realmente te haces tanto daño, esos son los peores fines de semana".

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