No puede decirse que la primera campaña de Xavi Forés en WorldSBK haya sido tranquila o que haya transcurrido sobre carriles, pero sí que ha sido tan trepidante y peleada como la que más. También puede afirmarse que ha cumplido con las expectativas que se esperaban de un experimentado piloto como él, y consecuencia de ello ha sido el reciente anuncio de su renovación por un año con el equipo Barni Racing. El piloto, de 30 años, volverá a ser representante único de la escudería que dirige Marco Barnabó y por tanto podrá dar continuidad al proyecto iniciado con su llegada en 2016 al Campeonato del Mundo MOTUL FIM Superbike. 

“Mi principal objetivo era renovar con Barni porque, no siendo un equipo de fábrica, creo que es el que puede estar más cerca de las motos oficiales en cuanto a nivel técnico” explica Forés en conversación con WorldSBK.com. “Yo quería tener una moto competitiva para el año que viene para poder estar delante y hacer buenos resultados y al final lo hemos conseguido. Nos ha costado un poco más de lo esperado, pero al final ha salido bien y estoy muy contento”.

Para Forés también contaba, y mucho, el hecho de poder seguir con Ducati, una marca con la que ha mantenido un estrecho vínculo en los últimos años.

“Este será mi quinto año vinculado a ellos. Para mí era importante quedarme con una marca que ya conozco y donde conozco a toda la gente desde que empecé. Para mí estar dentro de la familia Ducati es importante, creo que hubiese sido un error dejar la marca para ir a otro sitio. He peleado por eso, por quedarme y dar continuidad al proyecto con Ducati”.

Asegurada la continuidad, preguntamos al piloto de Llombai por sus planteamientos de cara a 2017. Forés lo tiene meridianamente claro:

“Me voy a exigir muchísimo más. Hemos acabado 2016 bastante bien. En las últimas carreras, y también en entrenamientos, hemos estado siempre en el top 5. Quizá en las carreras nos haya faltado un poco de suerte, y creo que los errores que hemos cometido este año son experiencia para aprender y poder mejorar el año que viene”.

“El objetivo es estar entre los cinco o seis primeros al final de Campeonato y luchar por los máximos podios posibles” define el piloto español. “Este año hemos conseguido uno, varios cuartos puestos, varias primeras filas, y para ser el año de debut creo que no ha estado mal, pero siempre queremos más y pienso que año que viene debemos dar un paso más en la clasificación general y en la pelea por los podios”.

Sin embargo, en 2017 los podios podrían estar más caros que nunca: A los adversarios conocidos se unirán los retornados Marco Melandri, con una Ducati oficial, y Eugene Laverty, con Aprilia. Además, Stefan Bradl desembarca en el equipo Honda y Michael Van de Mark reforzará la escuadra oficial Yamaha.

“Sí, sin duda va a ser un año de mucho nivel en el Campeonato, llegan nombres nuevos, motos nuevas y el nivel va a subir, evidentemente, pero creo que nosotros también estaremos un poco más preparados. El año pasado partíamos de cero, no nos conocíamos, no teníamos información de nada, llegamos a la mayoría de circuitos sin una base en la moto y nos costó más de lo esperado. Creo que el año que viene llegaremos más preparados, que nuestro nivel subirá más en cuanto a resultados y como equipo; tendremos alguna modificación en el apartado técnico en nuestras motos que también nos permitirá ser más competitivos, con lo cual considero que deberemos estar en la lucha por el podio con todos los pilotos top que ya están trabajando. Creo que no vamos a estar lejos porque también nosotros vamos a mejorar en este aspecto y vamos a tener un material de primera fila”.

En el balance de 2016 es inevitable recordar la lesión de principio de temporada en Phillip Island y su primer podio en WorldSBK en Alemania, pero también sus formidables peleas, a veces en medio del pelotón, remontando a cara de perro por un cuarto o un sexto puesto. Una lucha no tan visible como la de delante, pero igualmente dura.

“Si, este año el Campeonato se ha basado un poco más en el primer grupo, con las dos Kawasaki y Chaz Davies y con algún piloto añadido en ocasiones, pero la guerra en el segundo grupo ha sido fuerte” reivindica Forés. “Quitando a esos tres pilotos, ha habido muchísima igualdad en la parrilla y se han visto buenas batallas entre el cuarto y el octavo, a veces incluso hasta el noveno o el décimo. En Laguna Seca peleamos un grupo entero; eso hace que sea bonito y a la vez que aumente nuestro nivel de pilotaje. De esa carrera hasta final de campeonato me he sentido con un poco más de experiencia, he sido más fuerte encima de la moto, he afrontado fines de semana de manera diferente. Al final me quedo con eso y lo utilizaré para afrontar la pretemporada y la campaña, procurando no cometer el error que tuve en Australia al lesionarme a las primeras de cambio, algo que me perjudicó bastante durante el año”.

Forés y el Barni Racing están ultimando su programa de trabajo en invierno, y el valenciano no contempla ninguna prueba antes de final de año.

“Nosotros empezaremos en enero porque estamos definiendo todavía todo el apartado técnico, y como tampoco había muchísimo material nuevo por probar y la moto iban a ser prácticamente la misma, decidimos posponerlo para enero, cuando ya tengamos la moto nueva y las evoluciones que deben llegar, así que ya partiremos de la base que llevaremos en la temporada. Estaremos en Jerez, a principio de año, luego en Portimao y de nuevo en Jerez a continuación. Y luego ya tocará hacer las cajas para ir a Australia”.

Pero el proyecto que ocupa estos días a Forés está alejado de las motos y es muy especial: El piloto y su novia de toda la vida, Carla, ultiman los detalles de su boda, que se celebrará este sábado. Otro sueño cumplido.  

“Sí, estos últimos días han sido más de preparativos de boda que de cualquier otra cosa. Estoy emocionado porque ese es también un gran proyecto, personal en este caso, una etapa que hay que cruzar. Quería dar el paso con mi novia Carla, con la que ya llevo muchos años” explica Xavi. “Esperamos a estas fechas para que no coincidiera con nada en el calendario y estar más tranquilos. ¡Además, la confirmación de la firma para 2017 me dio tranquilidad, me quitó un peso de encima, porque hasta que las cosas no están cerradas puede pasar de todo, así que fue como un regalo de boda adelantado por parte de Marco!”