Después de conseguir el segundo mejor tiempo el viernes, el arranque del fin de semana resultaba prometedor para Leon Camier en su primera competición oficial con Honda. El sábado resultó ser un poco más difícil ya que el británico tuvo un problema en la Tissot-Superpole 2 y se fue al suelo, lo que le dejó en un puesto más retrasado de parrilla del que le hubiera gustado. Pero su séptimo puesto en la Carrera 1 supuso cuanto menos un buen botín de puntos. En la Carrera 2, el británico salió mejor parado, un sexto puesto tras una dura lucha para integrarse en el grupo delantero.

"¡Estuvo bien! Intenté llegar a los pilotos de delante", explica Camier. "Éramos realmente fuertes en algunas áreas, pero en otras perdía un poco. No podía acercarme lo suficiente en la salida de la curva 2 para recortar en la 3 y tratar de adelantar en la 4... sucedía en cada vuelta y lo mismo en la curva final, donde perdía terreno. ¡Era un poco frustrante porque no podía completar los adelantamientos! Pero nuestro ritmo fue bueno, estoy muy contento con eso. Los tiempos por vuelta fueron increíbles. Fue una carrera difícil y todo el mundo estaba superando los límites, ¡pero fue muy divertido!"

El piloto británico también subraya el buen entendimiento con el equipo, especialmente en una carrera que requirió una obligatoria parada en el pit lane para cambiar el juego de neumáticos: "La parada en boxes fue absolutamente perfecta y los muchachos hicieron un cambio muy rápido, ¡estábamos listos! Estoy contento con todo y aprendimos mucho. Espero que podamos seguir progresando, hay algunas cosas que podemos mejorar y sabemos lo que necesitamos en el futuro para ayudarnos a seguir adelante, así que espero lograr buenos resultados en el futuro y llamar a la puerta del podio tan a menudo como sea posible".

Su compañero de equipo Jake Gagne, dice que la carrera vio condicionada su carrera por una caída temprana, aunque pudo remontar posteriormente. Con sólo seis carreras disputadas antes de su debut a tiempo completo en 2018, el estadounidense se encuentra en plena curva de aprendizaje.

“Ha sido un fin de semana agridulce para mí", dice Gagne. "Hice un gran progreso con la moto, pero la caída significó que no pude obtener el resultado que éramos capaces de hacer. En el warm up estuve entre los diez primeros y en la Carrera 2 me sentí aún mejor, pero me encontré atrapado en un grupo con otros pilotos y cuando intentaba pasar en la curva cuatro encontré la puerta cerrada y me caí”. El californiano pudo al menos sumar unos puntos en su cuenta particular: "Fue una verdadera lástima, pero al menos pude recuperarme para terminar la carrera y anotar algunos puntos. En general, he mejorado mucho mi ritmo durante el fin de semana y he conseguido puntos en ambas carreras, así que es algo sobre lo que se puede construir. ¡Ojalá estuviéramos yendo a Tailandia mañana!”

Habrá que esperar algo más, pero no mucho. La segunda cita del Campeonato, con el trazado de Buriram como anfitrión, se disputará del 23 al 25 de marzo.