Augusto Fernández (WIL Sport) se convirtió en campeón de la Pata European Junior Cup powered by Honda 2014 después de una emocionante carrera bajo la lluvia a principios de este mes en Magny-Cours. El piloto español de 17 años sólo necesitaba finalizar décimo quinto con un solo punto para asegurarse matemáticamente el título, dada la ventaja de 24 que tenía sobre su único rival al llegar a la última carrera, su compatriota Javier Orellana (Europ Food SL).

Fernández hizo una carrera muy inteligente, manteniéndose lejos de los problemas para terminar tercero y lograr así su ansiado objetivo.

Después de escapársele el título el pasado año por una fracción de segundo frente a Jake Lewis, Fernández volvió más fuerte que nunca en la edición 2014 para conseguir el merecido premio de una plaza permanente como debutante para la próxima temporada del Campeonato de Europa FIM Superstock 600 con el equipo Honda Racedays.

Comenzaste la temporada siendo subcampeón del año anterior. ¿Crees que ese hecho ha resultado determinante para que terminaras ganando el título?

“El haber sido subcampeón del año anterior corriendo con los pilotos que este año ya estaban en Superstock 600 nos ha dado una valiosa experiencia para afrontar mejor las carreras esta temporada, sin duda.”

Sin embargo, en la primera carrera te quedaste fuera del podio pero a continuación comenzaste a ganar casi de forma consecutiva. ¿Cuándo empezaste a pensar que tenías realmente al alcance el título?

“Por supuesto, el objetivo de la temporada era el título, pero las cosas se torcieron un poco en la primera carrera, cuando salimos duodécimos en parrilla. Los clasificatorios siempre se me han dado mal en Aragón. El año anterior había salido vigésimo cuarto, pero al menos entonces pude remontar hasta el segundo puesto, pero este año salía el 12 y sólo pude llegar al cuarto y con todos los españoles por delante de mí. En ese momento te llegas a preguntar si este año tampoco va a poder ser. Pero después llegó la victoria de Assen, que respondió a todas mis dudas. Gané con una gran ventaja sobre el segundo. Aquello me hizo volver a creer en mis posibilidades.”

En Jerez tuviste la primera oportunidad de asegurarte el triunfo definitivo, pero no pudo ser. ¿Tan difícil lo viste en aquel momento?

“Lo cierto es que estaba bastante nervioso porque iba a correr delante de nuestra afición y allí también estaba toda mi familia. Probablemente estuve más nervioso en Jerez que en Magny-Cours. Aunque me resistía a pensarlo, no podía evitar ver Jerez como una última carrera en la que tenía que  asegurar el campeonato, sí o sí. Todo eso me hizo encarar la situación con muchos nervios. Tenía que terminar por delante de Javi (Orellana) para ser campeón. En carrera me di cuenta de que era un poco arriesgado jugármela así porque un cero me lo pondría mucho más difícil en Francia. Entonces pensé que si no lo conseguía en Jerez tampoco iba a pasar nada. Aún así lo intenté durante la última vuelta, pero tuve un toque con Orellana y no pudo ser. Él iba a darlo todo por alargar la carrera por el título, así que no quise arriesgar todo cuando en la última carrera me iba a bastar un único punto para conseguirlo”.

En Magny-Cours volviste a rodar en el habitual grupo salvaje. ¿Cómo fue para ti esa última carrera del año en la que te jugabas tanto?

“En realidad prefería correr con lluvia porque se suelen formar grupos menos peligrosos en carrera, ya que sobre seco es una locura, muchas veces estamos hasta 11 pilotos en el primer grupo. Bajo la lluvia podía quedarme rodando solo si se formaban espacios. Yo buscaba un lugar en el que rodar sin pilotos cerca delante o detrás con los que pudiera llegar a tener un toque y fastidiarlo todo. En la salida vi que Javi (Orellana) se marchaba con la intención de ganar y consiguió rápidamente una gran distancia. Quizá me hubiese podido ir con él, pero se la estaba jugando y yo no estaba por hacer lo mismo, no me hacía falta. Hubo unas vueltas en las que me quedé en una posición un poco difícil del segundo grupo. Les dejé pasar a todos y yo rodaba séptimo a cierta distancia, podía ganar el campeonato terminando en esa posición”.

“Después quedó claro que tuve suerte porque se cayeron los cuatro pilotos que tenía delante. Rodaban muy juntos y no pudieron evitar la caída en la chicane. En esas vueltas yo ya rodaba a buen ritmo, incluso algo más rápido que Orellana, que me sacaba una buena distancia. Ya estaba apretando y los pilotos que tenía delante también mantenían un gran ritmo, incluso un poco más rápido que el mío. Yo les veía y no sabía cómo podía acabar aquello. Cuando se cayeron una de las motos que cruzó la pista y tuve que variar mi trayectoria para evitarla. Gracias a la distancia que había dejado, pude ver la situación a tiempo”.

Aparte del subcampeón Orellana, ¿qué otros pilotos te han impresionado esta temporada y por qué?

“A Orellana le veo casi cada día porque entrenamos juntos. Quizá entre nosotros hay poca ventaja porque los dos sabemos cómo entrenamos. Sabía que iba a estar fuerte. El año pasado había quedado octavo en la EJC cuando yo fui subcampeón. Desde la primera carrera supe que iba a ser uno de los rivales más fuertes. Recuerdo que no veía a Licciardi como un rival tan serio. Sí que veía a Illán Fernández y Mika Pérez, ellos estaban fuertes desde el principio.”.

¿De cuál de tus victorias guardas mejor recuerdo?

“Assen fue una carrera bonita porque antes de ganar allí había estado retrasado en parrilla, por detrás de varios pilotos. Al ganar supe que también estaría al primer nivel. Después gané la siguiente en Imola y también fue muy bonita porque fue una victoria viniendo desde atrás. Fue una carrera difícil en grupo, así que ponerme primero a dos vueltas del final y ganar fue genial. En Misano también fue una carrera como la de Assen, venía de la carrera anterior en Donington donde había sido tercero y resurgir con la victoria resultó de nuevo una gran sensación".

Un importante aspecto de tu triunfo en la EJC es que también has ganado una plaza en el equipo Honda Racedays para la próxima temporada del Campeonato de Europa FIM Superstock 600. ¿Cuándo te subirás por primera vez a tu nueva montura?

“Saber desde ahora que la próxima temporada voy a poder seguir corriendo es lo mejor de todo. Hasta ahora no sabíamos si podría correr hasta el último momento. Siempre es mejor entrenar para una meta, pero hasta entonces mis pretemporadas habían estado llenas de dudas por lo que pudiera surgir. Ahora entrenamos para un objetivo concreto. Nunca me he subido a una 600cc, pero el equipo Honda Racedays me envía ahora una CBR 600RR con la que han corrido este año para que entrene en invierno y me vaya haciendo a ella. También estamos tanteando la posibilidad de realizar un primer test en noviembre cuando me envíen la moto. Me gustaría entrenar el máximo posible durante el invierno. Tengo muchas ganas de correr con una moto que empuje con más potencia. Quizá con la CBR 500R con que hemos corrido hasta ahora siempre querías más potencia. Creo que la 600cc se adapta bien a mi estilo de pilotaje, que es un poco agresivo. Creo que no me irá mal, pero hay que trabajar mucho aún”. 

Aparte, también tendrás la oportunidad de realizar un test con el equipo Pata Honda World Supersport y la montura del nuevo campeón del mundo de la categoría, Michael van der Mark. ¿Tiene fecha ya esa importante toma de contacto?

“De momento no tenemos una fecha concreta, pero se trata de un test muy importante porque es el equipo campeón del mundo de Supersport y en él también estará el personal de la fábrica Honda, pero de momento no sabemos la fecha”.

¿Tienes ya expectativas alrededor de esta primera experiencia en la categoría de STK600?

“Creo que el acuerdo podría ser por dos años, uno de contacto para aprender de los errores que pueda cometer y otro para ir a buscar una buena nota, pero en cualquier caso lo intentaré hacer lo mejor posible y, depende de cómo vaya la pretemporada, nos marcaremos unas metas u otras”.